El viernes los miembros del equipo que viajamos a Asuán nos despertamos pronto, pero algo más tarde de lo habitual, para disfrutar de un maravilloso desayuno en la Casa Nubia donde pasamos la noche. No nos entretuvimos mucho porque el día estaba lleno de actividades planeadas.

Foto: Mohamed Osman

Lo primero fue montarse en un barco de vela y cruzar el Nilo para llegar a la necrópolis de Qubbet el-Hawa, donde nos esperaban Jose y Luisa. Ambos nos hicieron una visita guiada a las tumbas del Reino Medio que el Proyecto Qubbet el-Hawa de la Universidad de Jaén lleva excavando desde hace diez años. Las tumbas son impresionantes y el trabajo de nuestros compañeros y amigos es espectacular.

Foto: Mohamed Osman

Después, volvimos a navegar hasta el centro de la ciudad. El viaje en barco duró algo más de una hora, tiempo que algunos miembros del equipo aprovecharon incluso para darse un baño en el río. Aunque la mayoría se conformó con disfrutar de los paisajes tan maravillosos que Asuán ofrece a ambos lados del río.

Foto: Mohamed Osman

En Asuán nos encontramos con una compañera de la misión francesa que trabaja en el templo de Karnak, que también había decidido visitar esta ciudad durante el fin de semana. Tras una comida rápida, todos fuimos al templo de Philae.

Foto: David Laguna

Este templo, que aún preserva el Nilómetro que los antiguos egipcios empleaban para medir la crecida del río y dónde se conservan los últimos jeroglíficos conocidos, fue trasladado por completo a otra isla tras la construcción de la famosa presa de Asuán. Aunque el templo está cerca de la ciudad, Philae te hace sentir en otro mundo, por eso todos nos sorprendimos cuando un grupo de estudiantes de Mohamed decidió sorprenderlo con una visita.

Foto: David Laguna

Todos juntos exploramos los bellos templos que conforman todo el complejo de Philae mientras el sol se ponía sobre el Nilo, lo que lo convirtió en el cierre perfecto de nuestro viaje.

Tras despedirnos de nuestros amigos nos montamos en nuestra furgoneta de vuelta a Luxor, donde nos esperaba la cena y la vuelta al trabajo…