Sector Este
El sector este de las colinas de Deir el-Bahari constituye, tradicionalmente, la zona menos examinada de la necrópolis. Herbert Winlock y la expedición del Museo Metropolitano de Nueva York tan sólo investigaron en profundidad los complejos de Meru (TT 240/ MMA 517) y Neferhotep (TT 316/ MMA 518) –donde obtuvieron resultados significativos– y las tumbas MMA 519 y MMA 520; en palabras de Winlock, éstas presentaban un aspecto que permitía pensar que hubieran quedado "sin finalizar". En principio, toda esta zona de la necrópolis debería albergar tumbas de oficiales que vivieron entre mediados de la Dinastía XII y mediados de la XIII. La presencia de la tumba del arquero Neferhotep (TT 316), con un ajuar funerario característico de finales de la Dinastía XII o principios de la XIII, indica que este sector de la necrópolis, el más alejado de la vertiente norte y del complejo del rey Mentuhotep II, debió ser el ocupado por individuos que ascendieron en la administración tebana a lo largo del Reino Medio; al contrario que otros oficiales, éstos desearon enterrarse en asociación con la necrópolis ancestral de Deir el-Bahari. Uno de los ejemplos de la localización oriental de complejos posteriores al inicio de la Dinastía XII se encuentra en la tumba E1 (tumba Carter 4 en Carnarvon/Carter, Five Years' explorations at Thebes, p. 22 y MMA 521 en las notas de Winlock, aunque en ocasiones no usó dicha referencia), que se encuentra incluida en la concesión del Middle Kingdom Theban Project y la UAH.

Uno de los complejos más característicos de la zona perteneció al arquero Neferhotep (TT 316), cuya tumba reveló la construcción de una capilla de culto sobre la puerta de entrada a la tumba donde se depositaron dos estatuas-cubo del difunto (actualmente en El Cairo, JdE 47708 y 47709) y un conjunto excelente con altar de ofrendas, estatuilla representando a una bailarina tatuada, varitas mágicas de marfil, un hipopótamo de fayenza y un escarabeo. Las dos tumbas próximas, MMA 519 y 520, fueron excavadas por Winlock sin mucho éxito. Los escasos materiales que halló en esta zona le llevaron a pensar que podrían ser tumbas inacabadas, aunque en su conjunto estos tres complejos fueron entendidos como las primeras construcciones ajenas a la zona oeste, donde se encontraban los monumentos funerarios de finales de la Dinastía XI y principios de la XII, y el resultado de oficiales que años más tarde quisieron vindicarse en asociación a la necrópolis de los seguidores de la casa de los Mentuhotep y los inicios de la Dinastía XII.

Hasta la fecha, el complejo funerario más al este de la concesión consiste en la tumba E1, etiquetada así por los arqueólogos del proyecto y con denominaciones anteriores como tumba 4 de Carnarvon y Carter o MMA 521 (numeración sugerida en los diarios de Winlock pero raramente aplicada a esta estructura). Copiando ejemplos anteriores, este complejo presenta un patio formado por ladrillos adobe (sobre todo en la parte superior) y por un muro de piedras que desciende la colina, y una sección interna en forma de hipogeo que se introduce en la montaña con un pasillo cortado en la roca con gran precisión. Este pasillo fue hallado originalmente en el 2018 colmatado de escombros y arena y ello llevó a pensar a los arqueólogos que podrían encontrarse ante una tumba sin saquear en tiempos modernos (aunque sin duda alguna lo fue hace siglos). Las próximas campañas de trabajo en la tumba E1 revelarán quizás quién fue el dueño de este monumento y el periodo concreto en el que se construyó.

El estudio del sector este de la concesión permitirá conocer en mayor medida el avance de la necrópolis durante el Reino Medio hasta bien entrada la Dinastía XIII. La identificación de los oficiales que decidieron construirse sus monumentos en esta zona de la colina, a la vista del resto de visitantes a la necrópolis de Deir el-Bahari, podría también ayudar a entender la distribución social y económica de un amplio territorio cuyo foco común era el templo de Mentuhotep II y las grandes y famosas tumbas de dicho periodo.