Hoy 30 de abril hemos puesto punto y final a la cuarta campaña del MKTP en Deir el-Bahari. Han sido tres semanas de trabajo muy intenso, sin descanso, para poder alcanzar los objetivos propuestos inicialmente durante el año. La falta de fines de semana y el trabajo diario sin descanso de 6 de la mañana a las 4:30 de la tarde junto a las tareas de la tarde y la noche han hecho que estos 21 días hayan parecido 35, como teníamos planteado a priori. El equipo, exhausto, ha demostrado una gran capacidad para adaptarse a las circunstancias y conseguir los objetivos, mezclando en el día de hoy una gran alegría por este punto y final tan intenso con la tristeza de cerrar las tumbas y dejar a muchos compañeros, historias y tareas detrás hasta el año que viene.

El día de hoy se iniciaba a las 5:30 AM con nuestra llegada al yacimiento. Por razones de seguridad, la policía prefiere que los equipos que vayan a cerrar sus tumbas en la zona de Deir el-Bahari lo hagan entre las 6 y las 8 AM, de modo que decidimos empezar media hora antes y estar en el yacimiento muy pronto para no perder un minuto. En dos horas Mohamed realizó fotos finales del yacimiento mientras los demás miembros del proyecto remataban otras tareas, como los cálculos de los pagos, las listas de los materiales o la recogida de herramientas y materiales que debíamos traernos de vuelta al almacén del proyecto. En pocas palabras, dedicamos ese tiempo a prepararlo todo para el cierre de la tumba y todo el ceremonial posterior, incluyendo el día de paga, un momento muy especial para todos. El final de todo el ceremonial vendría con el cierre y sellado de la puerta de la tumba del complejo de Ipi.
A las 8 de la mañana todo estaba listo para empezar con el ritual de la paga, celebrar el final “feliz” de la campaña y decir adiós a muchas personas en el yacimiento. Sin duda alguna, ha sido una sensación agridulce la que hemos tenido todos. Para saber más de las historias y anécdotas del raís Alí, de Omar, de Karam, Badawi, Talaat, Zaabut, Sayed, Gomaa y otros setenta trabajadores más tendremos que esperar otro año y reencontrarnos de nuevo en Deir el-Bahari, donde de seguro volveremos a compartir mil experiencias, risas, esfuerzos y planes. Todos ellos esperaban atentos el inicio de la paga, sobre todo porque siempre intentamos hacer de ello un día especial, más allá del pago por el trabajo realizado. Este año, mientras el moudir con la ayuda de Raúl y del raís Alí preparaba los pagos y listados de trabajadores, los demás miembros del equipo desplegaban sobre la mesa paquetes individuales con cuadernos, bolígrafos, globos, chocolatinas y otros juguetes para los hijos y nietos de los trabajadores. A su vez, en un par de mesas apartadas, se preparaban pasteles y bebidas para celebrar todos juntos al final de la jornada este gran esfuerzo que ha sido la cuarta campaña. Como miembros de este gran equipo humano configurado por expertos, trabajadores locales, autoridades, guardias de la necrópolis, policías y demás oficiales, no deja de sorprendernos la experiencia humana que supone sumergirse –aunque sea superficialmente– en la vida de los egipcios, en las dificultades y bondades de este país, en sus virtudes, carisma y humor, y en los modos de trabajar, vivir y entender el mundo que, en muchas ocasiones (no en todas), no deben diferenciarse mucho de los de los egipcios de época faraónica.
Al final del día visitábamos las nuevas excavaciones del equipo del Dr. Zahi Hawass, dirigidas a pie de campo por el Dr. Mahmoud Afifi. En sus excavaciones se encontraron con un pozo fundacional con materiales de un rey de la Dinastía XVIII y ahora buscan con esmero la entrada a la tumba, en la zona del Valle de los Monos. Sin duda alguna, pronto sabremos más sobre esta aventura científica y el posible descubrimiento de una nueva tumba real en la zona del Valle de los Reyes.
Un año más el equipo MKTP pone punto y final a una campaña llena de historias donde destacamos el valor humano y científico de esta expedición, el apoyo de la Universidad de Alcalá (UAH) que apuesta por una ciencia internacional, multidisciplinar, humanística y científica sin olvidar grandes valores, la búsqueda del conocimiento con honestidad, con esfuerzo, con voluntad y con el objetivo de documentar, salvar, publicar y compartir los resultados y el significado de nuestras investigaciones. También resalta de esta campaña la unión de esfuerzos a nivel de financiación, con la UAH y el MINECO al frente, con el apoyo continuado de la Fundación Palarq y con las ayudas de la Asociación Española de Egiptología y la Asociación de Amigos de la UAH. Les agradecemos a todos ellos su ayuda infinita. Finalmente, esta campaña vuelve a poner de manifiesto la capacidad de colaboración entre los investigadores y el Ministerio Egipcio de Antigüedades, y sobre todo, la generosidad del pueblo egipcio.
Ashufkum sana el-gaia, insha allah! Nos vemos el año que viene.