Esta primera semana estamos trabajando bajo un sol abrasador. A pesar de ser noviembre estamos superando los 30ºC. Al menos el té que nos prepara Nadjar nos ayuda a hacer frente a los rayos de Atón.

En el yacimiento, Carmen e Iria han continuado con las tareas de inventario en la tumba de Henenu, renovando los criterios de organización de las cajas que contienen diferentes tipos de objetos y registrando algunos de ellos en la carpeta del inventario arqueológico de hallazgos.

Mohamed y Bea han comenzado el día tomando las medidas de los principales puntos del patio de la tumba de Ipi con la estación total. Bea continuó con el registro de artefactos y los dibujos de los objetos más significativos tales como los shabtis, entre otros. Bettina también ha continuado completando los dibujos realizados de las jarras cerámicas de la tumba de Ipi centrándose en su manufactura.

Además, Reed ha comenzado a organizar y estudiar el cartonaje de la tumba de Ipi. Ha limpiado algunas piezas y ha debatido posibles futuras acciones de su restauración y de la de los objetos de alabastro con el inspector de conservación. Reed también ha tomado fotografías de cada objeto antes de decidir su tratamiento para comenzar con las tareas de conservación.

Por la noche, parte del equipo francés que excava en Karnak bajo la dirección del Dr. Luc Gabolde y del equipo austriaco-alemán que trabaja en un monasterio copto en Deir el-Bahît, liderados por la Dra. Ina Eichner, nos visitaron en el Marsam. Pudimos disfrutar de una agradable cena y sangría hecha por nuestro mudir. Durante la velada pudimos compartir experiencias y anécdotas de nuestro trabajo. Al final, invitamos a ambos equipos a nuestra concesión en Deir el-Bahari y ellos también nos han ofrecido visitar sus yacimientos. Insha’Allah podremos ir a verlos pronto.
